
TDAH – Trastorno por Deficit de Atención e Hiperactividad
Es difícil hacerse cargo de una enfermedad como el TDAH, Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, si solo se tiene en cuenta a un individuo; pues esto afecta la familia entera. Los padres a menudo se estresan, se confunden, o se abruman tratando de manejar a niños con TDAH. Cuando ellos comienzan a entender el TDAH y a sentirse más en el control, todo mejora en la casa.
Los padres de un niño con trastorno por déficit de atención e hiperactividad tienen de dos a tres posibilidades de adquirir el trastorno ellos mismos y esto puede influir en la forma en que se es padre. Lidiar con el TDAH requiere consistencia y un énfasis en la rutina diaria, que puede ser difícil cuando los padres no se han tratado el TDAH ellos mismos.
Cuando los padres se sienten mejor, también lo hacen los niños- un estudio de hecho dice que la causa número uno del estrés de los niños, es el estrés en sus padres. Cuando estamos estresados somos más reactivos, menos capaces de pensar claramente, y probablemente no tan amables y comprensivos como podríamos ser. Las necesidades de nuestros niños vienen primero, pero tenemos que encontrar el tiempo para nosotros también. Esto es a veces complicado, pero por lo general vale la pena.
La mayoría de los niños son motivados por cualquier clase de adultos, y los halagos y recompensas pueden ayudar a mejorar su comportamiento. Sin embargo, a veces sólo nos quedamos con la corrección y el castigo para cambiar el comportamiento de los niños.
Desafortunadamente, los niños con trastorno por déficit de atención e hiperactividad consiguen una cantidad increíble de retroalimentación negativa de padres y profesores. Para mantener el sentido del equilibrio en sus vidas, los niños con TDAH necesitan ser enfocados en halagos y felicitaciones sobre lo que ocurre en sus vidas. Las felicitaciones y las recompensas pueden no cambiar todo por sí solas, pero sí son el primer paso en cualquier plan para el comportamiento humano.
Con TDAH, cuando algo no es completamente apasionante es físicamente difícil persistir en la tarea, por motivos neuronales. Usar la recompensa para aumentar la motivación es como un empujón hacia la dirección correcta y un modo de mantener el cerebro en el objetivo.