¿Cómo las Relaciones de Pareja Afectan la Estabilidad Emocional de Nuestros Hijos?
La mayor preocupación para los padres es el bienestar de sus hijos. Sean momentos de crisis, problemas familiares o personales, si nuestro hijo está estresado lo único que queremos hacer es ahorrarle cualquier tipo de sufrimiento.
Pero lo cierto es que no siempre podemos ahorrarles los malos momentos a nuestros hijos, en especial cuando es una decisión personal de pareja, por ejemplo, la separación entre los dos padres o bien sea la relación de los padres con una pareja ajena.
Seguramente como adultos ya hemos adquirido todas las herramientas necesarias para manejar una relación. La buena comunicación, el establecer acuerdos y el tener compromisos sin duda es la mejor forma de lidiar entre parejas. Pero una decisión de separación podría afectar a nuestros hijos mucho más de lo que nos gustaría.
Un estudio de la Fundación Universitaria Área Andina de numerosos profesionales psicólogos y psiquiatras, evidencia que los niños sufren unos grados de estrés y ansiedad preocupantes cuando sus padres se separan. “La ansiedad por separación en los niños y niñas, constituye el efecto de la fractura y posterior disolución de una relación parental que sostenía emocionalmente a los hijos”, explica el estudio.
Sostienen que el 83% de jóvenes presentan trastornos de ansiedad luego de la ruptura de sus padres o de sus figuras paternales. Este trastorno se manifiesta generalmente en un estado de mal sueño, mala alimentación y mala concentración en la escuela, y 8 de cada 10 niños lo vive actualmente. Entonces cabe preguntarnos cómo mejorar esta situación, en caso de que se presente?
Primero, el estudio concluye que “es necesario que las personas busquen ayuda y asesoría antes, durante y después de separarse”. Pues si bien una separación no es un tema sencillo y se necesita llegar a muchos acuerdos tanto sentimentales como económicos, no se puede descuidar la salud mental de los hijos, a pesar de los sentimientos que como pareja tengamos.
Los padres deben entender que el desarrollo y el bienestar de sus hijos está primero, antes de la ira o el rencor por una situación problemática de pareja. Si los padres que están pasando por una separación se sientan con sus hijos y les explican por qué mamá y papá decidieron que no van a vivir más juntos ni a compartir sus cosas, y lo hacen de una forma amorosa, comprensiva y, sobre todo, honesta, estarán haciendo lo correcto.
Las figuras paternales en la vida de un niño son unas de las cosas más importantes, pues es la base en la que se guían para crecer y desarrollarse individualmente. Y esto no quiere decir que los padres no puedan separarse, quiere decir que deben estar conscientes en el momento de hacerlo para que sus hijos no sufran ni entiendan esa situación como la pérdida de algo muy importante, al contrario, que puedan entender la separación tal vez como algo bueno, o como algo necesario que no tiene por qué estar mal.
En el momento que explicamos las cosas a los chicos con amor y honestidad, prevenimos su sufrimiento, estrechamos nuestra relación con ellos, y lo más importante, les estamos enseñando a hacer lo mismo en un futuro lejano.